La melaza, también conocida como miel de caña o miel negra es una sustancia viscosa resultante de la transformación de la caña de azúcar en azúcar propiamente dicha. Dependiendo de la cantidad de azúcar presente, del suelo, del clima, de su método de extracción y de la edad de la planta, podemos tener diferentes tipos de melazas.
El proceso para elaborar melaza es el siguiente: se cosecha la caña de azúcar y se eliminan sus hojas, se le extrae el jugo y se hierve para concentrarlo, creando así una cristalización. A diferencia de otros azúcares refinados, la melaza contiene grandes cantidades de vitamina B6 y minerales, incluyendo calcio, magnesio, hierro y manganeso.
La melaza o miel de caña contiene un 30% de sacarosa, un 22% de agua, un 20% de otros hidratos de carbono, un 13% de fructosa y un 12% de glucosa. Contiene 3 calorías/g (algo menos que el azúcar común) y su índice glucémico es de 60 (vs. 65 del azúcar común).{alertInfo}
Podemos usar la melaza para acompañar las berenjenas fritas, como ingrediente principal de la destilación del ron, en la elaboración de panes de centeno, en algunos tipos de tartas y pasteles, para elaborar salsa barbacoa o en ciertos tipos de cerveza.
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¿Cuáles son las ventajas de la melaza o miel de caña? Al ser un alimento rico en minerales, su consumo puede fortalecer la salud ósea y combatir la anemia, al ser rica en vitamina B6, puede mejorar la piel y el cabello, es un buen laxante, ayudando a mejorar la calidad y regularidad de las heces.{alertSuccess}
¿Cuáles son los inconvenientes de la melaza o miel de caña? Al tratarse de un producto con gran contenido de azúcares, la melaza causa caries y tiene muchas calorías. La melaza tiene un índice glucémico bastante alto por lo que no es indicada para diabéticos. {alertWarning}
Como curiosidad, el lugar donde se produce la miel de caña o melaza se conoce como "ingenio", el único que queda en pie en Europa se encuentra en la localidad malagueña de Frigiliana.
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